Convivencia entre perros y tortugas
17 de febrero de 2023
Los perros son animales sociables y domesticados, por ello es muy factible que aprendan a convivir con diferentes tipos de animales sin embargo, es importante tener en cuenta algunas pautas para evitar disgustos innecesarios.
Las tortugas son animales bastante independientes, no vamos a encontrar por lo general una relación de amistad tal y como la entendemos las personas entre una tortuga y un perro así que lo que vamos a entender como buena convivencia entre perros y tortugas va a ser que haya respeto.
Es la labor más importante que debes hacer para evitar problemas, ya que si tu perro está acostumbrado a interactuar con todo tipo de situaciones y animales no tendrá grandes problemas con una tortuga ni con cualquier otro animal.
De tal forma que si tu perro desde cachorro ve tortugas aprenderá a respetarla e incluso a quererla en su entorno, lo notarás cuando la busque con la mirada o vaya cerca de ella y entonces sabrá que le gusta verla de vez en cuando.
Para que tu perro esté bien socializado necesitas llevar a cabo una rutina de experiencias naturales día a día. En la socialización hay que hacer hincapié en este hecho de naturalidad y rutina ya que es la clave fundamental para no caer en una sobre exposición.
La naturalidad nos indica que tu perro debe conocer todo en el mundo en el que va a vivir sin que se haga por obligación y con una obligación que el va a notar.
Es decir si queremos que se acostumbre a coches y bicicletas lo mejor es que se encuentre en ambientes donde siempre se encuentre bien con esos estímulos, no es necesario que le obliguemos todos los días a quedarse mirando bicis y motos porque a lo mejor puede acabar aborreciendo aquellos estímulos.
Es bueno que dos veces al mes por ejemplo, vayamos con él a una tienda de animales y que aprenda poco a poco con el tiempo a estar tranquilo en esos lugares, para ello tenemos que estar normales con él.
Al principio es normal que se ponga nervioso, no debemos reñirle las primeras veces porque solo conseguiremos que asocie mal esos sitios, una vez haya ido ya varias veces y sepa algunas órdenes podemos practicar en esos sitios el ven o el sienta de tal manera que sepa obedecer pese a los estímulos.
Al final normalizará esos sitios, le agradará ir, no se pondrá nervioso y eso le dará una seguridad en sí mismo que le facilitará el estar en presencia de otros animales sin ponerse nervioso y molestarles.
Tortugas de agua y tortugas de tierra
Antes de saber qué tipo de problemas y consejos debemos aplicar a cada caso debemos distinguir entre los dos tipos generales que existen de tortugas:
Tortugas de agua
Las tortugas de agua no van a tener problemas de convivencia con los perros ya que las tortugas de agua viven en su terrario y no suelen estar por casa excepto en momentos esporádicos mientras cambias el terrario de tu tortuga.
Con lo cual entre esa tortuga y tu perro no va a haber contacto, el terrario debería estar fuera del alcance de tu perro para evitar que por curiosear haya un accidente pero por lo demás.
Un perro va a dejar de sentir la presencia de ese terrario y se va a acostumbrar rápido a que exista un terrario, sobre todo si no lo ponemos al alcance, con lo cual la convivencia entre un perro y una tortuga de agua es sencilla y muy factible.
Tortugas de tierra
Las tortugas de tierra ya son harina de otro costal, porque por norma general suelen estar en los jardines, a veces en chalets y en definitiva si comparten espacio tanto con los dueños como con sus perros.
Es muy importante que se entiendan entre ellos, las tortugas de tierra suelen ser más tranquilas que las de agua pero aún así las tortugas si pueden tratar de defenderse.
Con lo cual no solo es el perro el que puede hacer un poco de daño a la tortuga si no que también puede ocurrir al revés, aunque por supuesto esto depende del tamaño del perro.
Lo más aconsejable es que la tortuga esté acostumbrada a la presencia de perros desde cría para evitar que se estrese, que ataque o que no pueda pasar una vida relajada por eso si quieres que ambos animales convivan es bueno que la tortuga sea cría cuando conoce otros perros.
Por otro lado con los perros pasa exactamente lo mismo, es mejor que sean cachorros y aprendan a convivir con otros animales, aunque si bien es cierto que un perro adulto bien socializado y educado puede adaptarse a convivir con una tortuga de tierra.
Un perro bien educado y que te hace caso acabará aprendiendo a tratar con tranquilidad a la tortuga.
Evita las malas experiencias
Como último punto pero no por ello menos importante, recuerda evitar las malas experiencias entre tu tortuga de tierra y tu perro, ya que los perros funcionan por asociación en gran parte de sus conductas.
Si a tu perro le muerde o se siente incómodo con la presencia de la tortuga puede que acabe cogiéndole miedo o reaccionando mal con ella por una mala experiencia y eso va a dificultar una convivencia tranquila.
De ahí que sea importante que la tortuga esté acostumbrada desde cría a animales como perros para que se mantenga tranquila y a su vez el perro debe estar en una situación de placidez, después de haber salido al parque, haber jugado y haber comido es un buen momento de hacer amigos.
Que el perro asocie su paz y felicidad con otro miembro en la familia le ayudará a quererlo y tratarlo bien, además de que sus experiencias siempre sean buenas. Y de esta manera al final podemos vivir situaciones divertidas como la del vídeo que os dejamos para terminar. 🙂
Apasionada por el mundo animal y fundadora de Kikechi, proyecto por el bienestar animal con el que participo activamente en diversas protectoras, como FAUDA, Unión Por Los Animales o CIEBA.
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